Irán Castillo dio a luz a su segundo hijo, de nombre Demian. Días después trascendió que la actriz estaba por comerse la placenta, una práctica que presuntamente conlleva múltiples beneficios para la salud de una madre. Ella explicó sus razones.
“Es increíble como la placenta puede ser nuestra propia medicina y se puede usar para tantas cosas tan maravillosas”, escribió Irán Castillo en una publicación de Instagram.
La placentofagia es la práctica de comer la placenta y otros restos del parto, conducta que es replicada entre la mayoría de especies de mamíferos por las hembras luego de dar a luz. El ser humano podría ser clasificado como una de las pocas especies que se abstiene de esta conducta.
A pesar del tabú, desde hace años la placentofagia ha sido promovida por figuras del espectáculo como Kim Kardashian y sus hermanas, así como muchas estrellas de Hollywood convencidas de las propiedades medicinales de la placenta.
La placenta es un órgano que se desarrolla en el útero durante el embarazo. Conectada al cordón umbilical, la placenta se encarga de brindar oxígeno, nutrientes y hormonas al bebé, así como el desecho de residuos. Cuando el bebé nace, el cuerpo de la mujer también se deshace de la placenta, al ya no ser necesaria.
No obstante, el entusiasmo de Irán Castillo o de otras madres famosas, es importante destacar que no hay evidencia científica que concluya que la placentofagia tiene algún beneficio para el ser humano. En caso de estar interesada, es recomendable que la madre consulta a su médico para explorar otras opciones.