Un grupo de estudiantes ecuatorianos, peruanos y colombianos desarrollaron videojuegos contra distintas patologías clínicas asociadas a la depresión y la ansiedad, informó este martes un consorcio formado por Toulouse Lautrec, la Fundación Universitaria del Área Andina y la Pontificia Universidad Católica del Ecuador. Los videojuegos se basan en las percepciones de los niños y adolescentes de la asociación educativa Fe y Alegría en Lima.
En el marco del “Game Jam: Start Over”, un hackathon internacional que reunió a expertos y estudiantes de la industria de los videojuegos, el consorcio interinstitucional anunció los resultados de sus recientes esfuerzos de ingeniería informática.
Uno de estos es El viaje y busca ayudar a las personas con ansiedad y depresión a través de retos que consisten en avanzar en pequeños pasos que abren nuevos caminos a través de los cuales el jugador va rompiendo burbujas de plástico.
Otros de los videojuegos son: Sunflower en donde se ayuda a una gata a conseguir su tranquilidad; “Ansiedad control”, que enseña cómo evitar caer en emociones no deseadas, y Moot, que plantea esquivar una lluvia de bocas y ojos que representan a los criticones.
El uso adecuado de los videojuegos aporta importantes beneficios a la salud física y mental de las personas. De hecho, al inicio de esta pandemia por COVID-19, la OMS promovió su uso como una herramienta para reducir la ansiedad por el encierro.
Los expertos han encontrado que los videojuegos pueden tener un efecto positivo en la vida de los jugadores, si hay equilibrio y otras actividades, ya que el tiempo y los videojuegos deben estar dedicados a no olvidar otras tareas cotidianas, según el informe mundial de la UNAM que se publicó en septiembre de 2019.