La princesa Mako de Japón, se casará el 26 de octubre con su excompañero de la universidad, perdiendo así su relación con la realeza de acuerdo a la Ley de la Casa Imperial.
En septiembre del 2017 la princesa Mako, formalizó su compromiso en su primera aparición pública juntos con el ahora abogado Kei Komuro, “Me sentí verdaderamente feliz cuando él se me declaró a finales de 2013 y acepté en el momento”.
De acuerdo a la Ley de la Casa Imperial: Las mujeres de la familia imperial nipona quedan desvinculadas de la institución cuando contraen matrimonio con un hombre que no pertenece al linaje y concede de forma exclusiva a los varones los derechos sucesorios al Trono de Crisantemo.
La princesa Mako, también renunció a la dote de 150 millones de yenes que reciben las mujeres de la familia imperial que contraen matrimonio y abandonan la institución, convirtiéndose en la primera princesa del Japón de posguerra que romper dos tradiciones.
La pareja planea mudarse a Nueva York tras contraer matrimonio para iniciar su nueva vida, lejos de los focos mediáticos nipones.
La princesa Mako de 30 años de edad, es la primogénita del príncipe heredero Fumihito, hermano del emperador Naruhito; y hermana mayor del príncipe Hisahito (15), segundo en la línea sucesoria.