Más de mil 400 delfines fueron cazados durante un día por el festival “grind” o “grindadrap“, una tradición ancestral en las Islas Feroe, un territorio autónomo danés, los hechos provocaron indignación y criticas en redes sociales.
El Gobierno local de las islas Feroe, defendió el festival diciendo que “estas cacerías están bien organizadas y totalmente reguladas”.
Un portavoz del gobierno de Torshavn, explicó que esta tradición consiste en rodear a los mamíferos y acorralarlos con barcos en una bahía, de está forma los pescadores que se quedan en la tierra los matan con cuchillos.
Regularmente suelen cazar ballenas piloto, sin embargo, esta ocasión fueron mil 423 delfines de flancos blancos, cuya caza también está autorizada. El producto de esta pesca no se comercializa, sino que se utiliza la carne.
La ONG ecologista Sea Sheperd considera el “grind” una “práctica bárbara”, pero las autoridades de las islas Feroe sostienen que es un sistema de caza sostenible.