En China, varios lugares público como hospitales, restaurantes, museos, transporte público e incluso oficinas gubernamentales, comenzaron a prohibir el acceso a las personas que no estén vacunadas conta el COVID-19.
Tras la expansión de la variante Delta alrededor del mundo y el aumento de casos de coronavirus, algunas oficinas gubernamentales en las provincias de Jiangxi y Zhejiang anunciaron que requerirán un certificado de vacunación COVID-19 antes de permitir el acceso a sus instalaciones, según el medio local Sixth Tone.
La Comisión Nacional de Sanidad, informó sobre 31 nuevos casos positivos de COVID-19 en 24 horas, un escenario de un pequeño rebrote en las últimas semanas.