Investigadores aseguran que tomar una dosis baja de aspirina reduce, el riesgo de ingresar en una unidad de terapia intensiva y las posibilidades de morir por COVID-19.
De acuerdo a un estudio realizado por un equipo de expertos de la Universidad George Washington y publicado en la revista científica Anesthesia and Analgesia, la aspirina en bajas dosis puede ayudar a proteger los pulmones.
Según el neumólogo Sebastián Cevallos la aspirina reduce significativamente el riesgo de enfermedad cardiovascular.
Señaló que la aspirina, es un potente anticoagulante, además explicó que cuando se sangra, las células sanguíneas se acumulan en la herida y forman un tapón que sella la abertura del vaso sanguíneo para detener el sangrado.
En algunos casos se ha visto que el COVID-19, produce trombosis, por lo que la terapia con aspirina reduciría la acción aglutinante de las plaquetas, lo que posiblemente prevenga estos casos.
Sin embargo, la recomendación de tomar aspirina diariamente deben hacerla un especialista; además señalan que los enfermos no deben tomar la decisión sin consultar al médico, menos aún las personas sanas.