Como una medida para controlar y prevenir contagios de COVID-19, el gobierno de China hizo obligatorias los test rectales para detectar el COVID-19 a los viajeros que lleguen al país del extranjero.
De acuerdo al director del Centro Clínico de Salud Pública de la Universidad de Fudan (Shanghái), Lu Hongzhou, las pruebas anales son “más estables y precisas” que las de nariz y garganta, “en las que es más probable tomar muestras inutilizables o dar resultados erróneos”.
Previamente las autoridades de China señalaron que esta prueba detecta de forma más precisa el Covid-19 que otras usadas tales como la toma de muestras faríngeas con hisopos introducidos a través de la nariz, saliva o sangre.
Recientemente, Japón, pidió a China, suspender las pruebas anales a sus residentes, luego de que algunos viajeros japoneses notificaron haber sufrido un “trauma psicológico” tras ser sometidos a este procedimiento.
Sin embargo, según Global Times, tanto Pekín como la provincia de Shandong están solicitando que las pruebas anales para detectar el coronavirus se integren a los requisitos de cuarentena a la llegada al país desde el extranjero.