Ante su regreso a clases, los alumnos chinos deberán portar un brazalete electrónico encargado de detectar el COVID-19.
Los brazaletes proporcionaran en tiempo real la temperatura de cada uno de los alumnos.
Esta medida se encuentra en fase de prueba en cinco distritos de China ya que con ello se busca evitar una nueva ola de contagios por coronavirus.
Alumnos de Pekín regresaron a clases este lunes portando los brazaletes electrónicos que dan alerta en caso de que alguna persona presente fiebre.
El dispositivo es un ejemplo de las nuevas tecnologías que ha desarrollado China para controlar el COVID-19, virus que ha infectado alrededor de 83 mil personas y causado casi 5 mil muertos.
Los padres y los centros médicos podrán monitorear la salud de sus hijos a través de una aplicación para celular, la cual les reportara el avance y estado de salud de los jóvenes estudiantes.
En situaciones de temperatura anormal, los profesores tendrán que avisar a la policía para regresar al joven a casa y llevarlo a atención médica.
De momento las medidas de seguridad por coronavirus siguen en pie, por lo que, aunque hayan retomado sus actividades cotidianas, deberán seguir estrictamente el uso de mascarilla en todo momento, lavarse las manos y mantener una distancia no riesgosa.