Cuernavaca, Morelos; 21 de agosto de 2017.- Los gastos médicos para atender a una persona que sufre una lesión por un arma de fuego de grueso calibre y que le provoca daños severos a la salud, pueden ascender hasta casi medio millón de pesos.
Romeo Ocampo Domínguez, ganador del Mérito Médico del Congreso de Morelos, señaló que los tratamientos son muy costosos y representan un gran gasto al Estado.
“A nivel nacional cuesta un dineral un baleado, no tienen idea de lo que cuesta un baleado, pero uno se lleva hasta medio millón de pesos, porque requieren de cirugía, requieren de terapias intensivas de recuperación”.
Explicó que en el pasado las agresiones se registraban con calibre 22 milímetros y actualmente se agreden con armas de grueso calibre como AK-47.
-Xavier Omaña-