Cuernavaca, Morelos 02 diciembre 2016.- La Comisión de Derechos Humanos de Morelos (CDH Morelos) vigilará que durante la puesta en marcha del programa de alcoholímetro en Cuernavaca se respeten las garantías de los ciudadanos y que posteriormente no se busque hacer un negocio como sucede en Jiutepec.
Y es que el Ombudsman, Jorge Olivares Brito, informó que tras un estudio realizado al proceso de multas que aplica el ayuntamiento de Jiutepec, se descubrió que los costos que tiene que pagar el ciudadano son demasiado elevados.
“En meses anteriores hicimos un estudio y realmente en el caso de Jiutepec, cuando una unidad era llevada al corralón y viendo que es fin de semana, pues efectivamente la unidad debería de ser devuelta a su propietario hasta el día lunes siguiente y entonces transcurren 48, a veces 72 horas y eso representa desde un costo que supera los siete mil pesos en el caso de Jiutepec, así se veía, trataremos que en Cuernavaca no se vea con ese ánimo, no se trata de beneficiar a los amigos grulleros”.
Señaló que las quejas más recurrentes de los automovilistas es la insistencia de los elementos policiales para que se sople en más de una ocasión en el alcoholímetro con el afán de que se detecte un mayor grado de ingesta de bebidas embriagantes.
-Xavier Omaña-