Este jueves 15 de junio, un grupo de artistas circenses visitaron el Vaticano. Uno de ellos llevo un cachorro de tigre de seis meses de edad que pareció intimidarse ante la presencia de miles de personas en el sitio. Mientras el pequeño tigre era alimentado con un biberón, el Papa Francisco se acercó a acariciarlo, lo cual hizo que el felino saltara asustado.
-Redacción-